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Meditación para adolescentes

El escaneo corporal y la meditación de gratitud fomentan la calma y el enfoque en los adolescentes. Estas prácticas mejoran la resiliencia emocional y promueven el bienestar general.

Actividad

La meditación de escaneo corporal es una práctica de atención plena que ofrece numerosos beneficios tanto para la mente como para el cuerpo. Los beneficios de esta práctica incluyen la reducción del estrés, la mejora de la conciencia corporal, y el alivio de la tensión acumulada.

 

Al fomentar un estado de relajación profunda, el escaneo corporal ayuda a calmar la mente, mejorar la concentración y promover un bienestar general. Además, esta técnica es especialmente útil para gestionar la ansiedad y cultivar una mayor autocompasión, lo que contribuye a un equilibrio emocional más estable.  ​

 

Por otro lado la Meditación de gratitud, en la meditación, amplifica estos beneficios al enfocar la mente en aspectos positivos de la vida, lo que mejora el estado de ánimo y fortalece la resiliencia emocional. La gratitud activa áreas del cerebro relacionadas con la recompensa y la satisfacción, promoviendo una sensación de bienestar duradera.

 

Al combinar el escaneo corporal con la gratitud, se potencia la capacidad de enfrentar desafíos con una perspectiva más equilibrada y positiva, fomentando no solo la relajación, sino también una profunda apreciación de lo que tenemos.   

 

Indicaciones Adolescentes (13-18 años):

Frecuencia: Se recomienda meditar diariamente o al menos 5 veces por semana.

Duración: Entre 10 a 20 minutos por sesión.   

 

“Meditación de Escaneo Corporal” 

  • Encuentra una posición cómoda: Siéntate o recuéstate en un lugar tranquilo donde no te interrumpan.  Cierra los ojos y respira profundamente: Comienza tomando algunas respiraciones lentas y profundas para relajar el cuerpo y la mente. 

  • Dirige tu atención a los pies: Empieza concentrándote en los pies, observando cualquier sensación que sientas, como calor, frio, presión o incluso la ausencia de sensaciones. 

  • Avanza lentamente por el cuerpo: Mueve tu atención gradualmente hacia arriba, recorriendo las piernas, la pelvis, el abdomen, el pecho, la espalda, los brazos, las manos, el cuello y la cabeza. 

  • Observa sin juzgar: Mientras escaneas cada parte del cuerpo, simplemente nota las sensaciones sin intentar cambiarlas o juzgarlas. 

  • Respira en cada área: En cada parte del cuerpo, acompaña la atención con una respiración profunda, imaginando que envías la respiración a esa área. 

  • Relaja las áreas tensas: Si notas tensión o incomodidad en alguna parte, intenta relajarte suavemente, pero sin forzarlo. 

  • Termina con una respiración profunda: Cuando completes el escaneo, toma un par de respiraciones profundas antes de abrir los ojos y concluir la práctica.   

 

“Meditación de Gratitud”

Practicar la gratitud puede mejorar el estado de ánimo y la perspectiva de los adolescentes. 

 

  • Siéntate cómodamente y cierra los ojos.  Respira profundamente y piensa en tres cosas por las que estás agradecido.  Dedica unos momentos a sentir profundamente esa gratitud. 

  • Avanza lentamente por el cuerpo: Mueve tu atención gradualmente hacia arriba, recorriendo las piernas, la pelvis, el abdomen, el pecho, la espalda, los brazos, las manos, el cuello y la cabeza. 

  • Observa sin juzgar: Mientras escaneas cada parte del cuerpo, simplemente nota las sensaciones sin intentar cambiarlas o juzgarlas.  Respira en cada área: En cada parte del cuerpo, acompaña la atención con una respiración profunda, imaginando que envías la respiración a esa área. 

  • Relaja las áreas tensas: Si notas tensión o incomodidad en alguna parte, intenta relajarte suavemente, pero sin forzarlo.  Termina con una respiración profunda: Cuando completes el escaneo, toma un par de respiraciones profundas antes de abrir los ojos y concluir la práctica.  ​​

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“Meditación de Gratitud”

Practicar la gratitud puede mejorar el estado de ánimo y la perspectiva de los adolescentes. 

 

  • Siéntate cómodamente y cierra los ojos. 

  • Respira profundamente y piensa en tres cosas por las que estás agradecido. 

  • Dedica unos momentos a sentir profundamente esa gratitud. 

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